Ideas complejas y no tanto.
En festivales o entre los estrenos comerciales de los jueves, todos los años aparece un buen número de buenas películas. El panorama se achica un poco si sólo se toman buenas películas realizadas por buenos directores, que tengan una obra sólida y consecuente. Y más difícil es toparse con films que manifiesten las ideas complejas sobre el mundo que tienen sus autores. Habría que pensar más y mejor la categorización, acaso un tanto simplona, pero en principio se puede dividir a los autores entre quienes expresan en sus films sus ideas complejas sobre la política, el arte, las relaciones humanas, etcétera, y quienes no. Hay muchos grandes directores, pero no son tantos los que presentan una visión diversa y rica en matices sobre la realidad que los rodea. Un ejemplo provisional: Lucrecia Martel lo logra, Lisandro Alonso no. Lo que no quiere decir que Alonso no tenga ideas complejas sobre el mundo, sino que -deliberadamente o no- no aparecen en sus películas.
Lee Chang-Dong tiene ideas muy complejas sobre el mundo, lo que indidablemente se advierte en sus películas. Este escritor, que estudió literatura en la Universidad de Kyungbuk, decidió cambiar la pluma (o el cursor) por la cámara, pero no renunció a la escritura. Como pedía Alexandre Astruc hace más de seis décadas, Lee no ilustra sus ideas sino que directamente las compone con su caméra-stylo, lo que se hace explícito, por ejemplo, en el movimiento y plano final de la gran Secret sunshine (2007). Forma y fondo son inescindibles en su cine, como lo demuestra también Poetry, su más reciente película. Como escribió Roger Alan Koza en el catálogo del Festival: "Aquí lo poético no se dice sino se muestra; surge literalmente de los planos del film, planos que devienen en versos. Es lógico que Lee renuncie a la música, pues interrumpiría la métrica sonora de sus imágenes".
Luego de tanto rodeo, entonces, ¿cuáles son las ideas de Lee Chang-Dong? El asunto no es sencillo justamente porque su cine, consecuentemente, es complejo, rico en matices, profundamente contemporáneo; no se oculta en vagas solemnidades pero tampoco es concesivo. Como advirtió Carolina Giudici, gran amiga de este blog (que ojalá escriba en el suyo todas las buenas ideas que tiene en torno a la película), Poetry es entre otras cosas una especie de respuesta a la famosa sentencia de Theodor Adorno: "No es posible escribir poesía después de Auschwitz".
No hay, en cambio, ideas complejas en Essential Killing, del veterano polaco Jerzy Skolimowski, que ganó el Astor de Oro a la mejor película del Festival. Creer que el mundo es un lugar salvaje, como dijo el propio director en una conferencia de prensa posterior a la proyección, es apenas una impresión sin demasiada profundidad. Aunque ocultas detrás de cierta abstracción y elegancia, a la película se le escapan los típicos clichés sobre los militares y el militarismo estadounidense. Todo para contar cómo un hombre se convierte -de modo en exceso arbitrario- en animal para sobrevivir. ■
Mar del Plata 2010: tercera entrega
Publicado el 24.11.10 por Andrés
Etiquetas: Festivales, Jerzy Skolimowski, Lee Chang-Dong, Mar del Plata 2010 |
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