Dentro de unas horas comienza la ceremonia de entrega de los premios Oscar en el Kodak Theatre de Los Angeles. Luego del papelón del año pasado no voy a intentar pronósticos. Para eso pueden recurrir a quienes tienen más oficio y están mejor informados, como el crítico Diego Lerer.
De lo que no tengo dudas es de que se trata de una de las premiaciones más chotas de los últimos años. Las cinco nominadas son películas mediocres, chatas, temerosas, con poco para ofrecer. Ni siquiera hay algún peligroso bodrio estilo Vidas cruzadas (Crash, Paul Haggis, 2004), que ganó en 2006 y generó un escándalo en algunos ámbitos. La única excepción es Slumdog millionaire, la de Danny Boyle, que no es gran cosa pero al menos agitó y permitió la discusión. El resto, poco y nada.
Por la proximidad de los Oscar, febrero suele ser el mejor mes para ver cine made in Hollywood. Hay montones de estrenos -tanques y no tanto-, todos discutimos sobre ellos y nos ponemos complacientes con películas que probablemente jamás volvamos a ver. Por suerte sólo tiene 28 días: a fines de marzo comienza el Bafici, y luego viene Cannes para marcar gran parte de la agenda del resto del año. Y ahí, sí, veremos otro cine. Que también tiene sus vicios pero suele deparar más sorpresas. ■
Es cierto... lo que me gusta de febrero es que con esto de las nominaciones veo todas las películas nominadas hoy sacaba la cuenta y había visto 22 películas de todas las nominadas en los premios... hoy espero las nominaciones, las veo y me queda todo el resto del año para disfrutar del cine que realmente quiero... total! lo que la cartelera traerá ya lo vi. puedo volver a recuperar ese cine que no he visto porque no existía o porque no llega tan rápido de otras latitudes.
ResponderEliminarMañana comentamos que pasa... entre nos espero que Slumdog no gane mejor película (me preocuparía)
No estoy de acuerdo, las peliculas nominadas tienen calidad, ha habido años peores
ResponderEliminarAnd the winner is... entertainment.
ResponderEliminarCreo que fue la mejor ceremonia en años, la más divertida y menos solemne, al menos.
De los premios mejor no hablemos :P (aunque Winslet, Penn, Cruz y Ledger tienen merecidísimas sus estatuillas)
Saludos!
Rogolagos. No me disgustó que haya ganado Slumdog millionaire. Como dije en el post, la de Danny Boyle no es gran cosa pero al menos agitó y permitió la discusión.
ResponderEliminarPrincipe Mestizo. No se a qué te referís con calidad: el término es demasiado amplio. Seguramente habrá habido algún año peor, pero si tomamos los últimos diez (del 98 para acá) creo que a la ceremonia de anoche no hay con qué darle: la más chata. Revisá y después hablamos.
mge. No soy un gran seguidor de las ceremonias (debo haber visto cuatro o cinco en toda mi vida). La de anoche no estuvo mal, pero, debo admitir, me gustaba más Billy Crystal. Y no me parecen tan merecidos los premios de Winslet, Penn, Cruz: ninguna de las tres actuaciones me gustó demasiado.
Gracias por los comentarios.
Saludos
Pocas veces llegué tan "preparada" a la entrega de los Oscar como este año. Dicho de otro modo, creo que nunca vi tantas películas nominadas antes de la entrega.
ResponderEliminarEn un orden de mayor a menor, disfruté de El luchador, de Vicky Cristina Barcelona y de la primera parte de El lector. También valoré la posibilidad de descubrir a Harvey Milk, cuya trayectoria ignoraba hasta la película de Van Sant.
Pero el esfuerzo fue agotador.
Creo que la sensación se debe, en parte, a la chatura (¿chatarra?) que mencionás. Valga la metáfora trillada, quedé como empachada, como después de haber engullido al hilo varios Big Mac.
Saludos, Andrés.
Cada vez es peor. Igual que el año pasado me quedó al sensación de "la bola en la ingle"...
ResponderEliminarLa bola en la ingles es la bola en la ingle! Cada candidato era peor que el otro, daba pena. Y encima Benjamín Botón le ganó efectos especiales a Hellboy... Y perdió Rourke.
ResponderEliminarBuuu... erns! buuu... erns!