Una pequeña joyita

Escena de Be with Me
El plano inicial, mientras pasan los créditos, ofrece unas cuantas pistas sobre lo que vendrá. La cámara inmóvil muestra el frente de un negocio y a un hombre que, con parsimonia, recoje sus cosas y cierra la persiana. Este minimalismo será una constante de Be with Me (Eric Khoo, 2005), una de las primeras películas (¿la primera?) que llega desde Singapur hasta el circuito comercial porteño.

Afiche de Be with Me
BE WITH ME (2005)
Fecha de estreno: en Singapur, 8 de setiembre; en Argentina, 8 de noviembre de 2007. País: Singapur. Duración: 93 minutos. Dirección: Eric Khoo. Producción: Tan Fong Cheng, Brian Hong, Kim Hoh Wong. Guión: Theresa Chan, Eric Khoo, Kim Hoh Wong. Fotografía: Adrian Tan. Montaje: Low Hwee-Ling. Música: Kevin Mathews, Christine Sham. Elenco: Theresa Poh Lin Chan, Ezann Lee, Samantha Tan, Seet Keng Yew, Lawrence Yong, Chiew Sung Ching, John Choong, Sherry Lim, Shaun Koh, Ng Sway Ah, Leong Koi Eng, Lynn Poh, Jason Tan, Elizabeth Choy.

Film coral, de una narración poco convencional plagada de silencios y sugerencias, cuenta cuatro historias que se cruzan. Un empleado de seguridad, voyeur con pocas ideas, enamorado de una mujer imposible a quien no se atreve a encarar. Dos amigas adolescentes que están descubriendo su sexualidad luego de haber coqueteado con el lesbianismo. Un comerciante que sigue lamentando la muerte de su esposa. Y una mujer de sesenta y pico, ciega y sorda, que relata una vida de esfuerzos.

Theresa Chan, que perdió la vista y la audición durante su adolescencia, se interpreta a sí misma. Una estética absolutamente austera, casi sin diálogos ni movimientos de cámara pero alejada de solemnidades, nos introduce en su increíble vida sin apelar a sentimentalismos ni golpes bajos. Resulta imposible no emocionarse con su historia: cómo aprendió a hablar inglés a pesar de sus limitaciones; el recuerdo del único amor de su vida, fallecido hace años; cómo se desenvuelve sola en un mundo hostil para gente como ella.

Entre el documental y la ficción, la película gana claramente cuando se acerca a lo primero. Los vaivenes de las dos teens y del guardia de seguridad son un tanto previsibles, y por momentos Khoo cae en cierta sobreexplicación que contradice el tono insinuante del resto de la película. Pero a medida que la narración avanza se impone la conmovedora autobiografía de Theresa y las ficciones que la rodean comienzan a desvanecerse.

Be with Me no es una gran obra. Pero sí una pequeña joyita, modesta, infrecuente por su origen y su desarrollo. Una película sobre la soledad que sabe cómo mostrar aquello que no se ve pero se siente. ■

5 comentarios:

  1. Sin dudas, Be with me es una joyita muy conmovedora.
    No encontré que los vaivenes de las dos adolescentes y del guardia de seguridad fueran sobreexplicados. Sí hay una insistencia que -me parece- pretende reflejar cierto nivel de dolor y obsesión típicos de los enamoramientos desafortunados. Pero en ningún momento la narración me pareció redundante.
    Me gustó mucho tu cierre del post, Andrés, cuando hablás sobre "una película sobre la soledad que sabe cómo mostrar aquello que no se ve pero se siente".
    Un saludo.

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  2. Tal vez exageré un poco, pero creo que algunos planos (como el de guardia de seguridad en el piso, sangrando, con la chica encima) estuvieron de más. Y se veía venir que esas dos historias tendrían un final trágico (lo del intento de suicidio estaba cantado).

    Pero de todas maneras, como dije, me gustó la película.

    Saludos

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  3. No la ví aún, pero por tu análisis me dan muchas ganas. Saludos

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  4. Aunque se exhibe en DVD y seguramente luego se conseguirá en videoclubes, bien vale la pena ir al cine.

    Saludos

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  5. Bueno, veo por el post y los comentarios que se trata de una película que no hay que dejar pasar. Espero verla pronto.
    Saludos a todos.

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